lunes, enero 29, 2007

El niño del huevo (parte II)

-"¿Huevos?"

-"Si, si quieres trabajar yo te consigo todo para que vendas huevo" me dijo mi padre convencidísimo de que ese era el nego demi vida y el instrumento perfecto para alcanzar el tan ansiado Nintendo.

Durante unos segundos me quedé congelado,viendo pros y contras y haciéndole a la jalada la verdad, mi papá una vez más había conseguido ponerme en una situación de "vas o no vas con boletazo (o sin boletazo, total daba igual)", no había de otra, si quería el dinero necesitaba hacerla de granjero o de gallina, lo que resultara más fácil,viéndolo bien creo que iba a resultar agradable, de hecho estaba resuelto a ser destapacaños o patiño de Paty chapoy, así que después de todo iba a ser empresario, y no cualquier empresario, un empresario de huevos.

-"Ya me vi ma, ya me vi" le decía a mi señora madre a manera de comercial de pronósticos deportivos mientras me imaginaba echado en un sofá con un cerro de cartuchos de Nintendo, tomando Coca-Cola de 2 litros y un bote con Chetos y Pizzerolas, con mi mamá contestando los teléfonos y surtiendo pedidos de los más remotos lugares de la república:

-"Desde Soconusco hasta el Ajusco" repetía para mis adentros cuando me preguntaba hasta donde iban a llegar mis camiones cargados de "Huevos Toño", si, a hu...fuerza!

Todo ese torrente de entusiasmo de Bill Gates me duró el tiempo que mi papá bajó de su camioneta una caja de cartón con un montón de huevos apilados (no depilados) que olían medio extraño (pss a huevo wey!) y con un peso equivalente al que yo tenía en esa mi época delgada.

-"Acomódalos uno por uno sin que se rompan,los sencillos los vas a dar a 10 el kilo y los de doble yema a 15, te compré también unos conos para que los lleves y ya te pongas a trabajar."

Comenzaba a sonar a mucho trabajo cuando me dijo lo peor:

-"Esto es negocio, ya pagué la inversión, así que entre más vendas, más rápido recuperarás esa inversión".

-"¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeee?, a ver a ver, ahora resulta que aún no empiezo a ponerme el traje de mamá gallina y ya debo el dinero?, ¿En qué maldito mundo hemos convertido este paraje de Dioooooos?,¿Yo sólo soy un niñoooooo (si si, medio cabrón y huevas) pero solo un niñoooooo buaaaaa..." le reclamaba al cielo mientras mi padre me veía con esa cara amable y comprensiva:

-"No seas maricón, asi es ésto".

Después de tan reconfortantes palabras, mi yo interno se sintió entre confundido y alentado, ni hablar, tendría que sacar la inversión primero,inches reglas!!

Ese día,me acosté muy tarde acomodando los huevos (no rascándomelos eh?), haciendo cuentas, empaquetándolo todo,hasta que me fui a dormir esperando ansiosamente mi primera aventura en mi primer trabajo, todo sería un éxito, tendría un nintendo y porque no?, una tele bien chirolira, hoy Xalapa, mañana el mundo!!!!.

Enmedio de estos sueños de grandeza me fui a dormir, se jetearon mis "yos" y poco después caí yo.

Al otro día...

C O N T I N U A R Á...

1 comentario:

Zara dijo...

jajajaja a mi me paso algo similar , los padres siempre inventan negocios pendejos , poco rentables donde al final te decepciones terminas de webon y sin dinero , y lo bueno de esto ( al menos en mi caso) es ... creo que no hay cosas buenas .